1995 Ilustrar lo sublime

Leioa, Servicio Editorial Universidad del País Vasco, 1995. 266 pp.
ISBN: 7585-795-7

Leioa, Servicio Editorial Universidad del País Vasco, 1995. 266 pp.
ISBN: 7585-795-7

El concepto de lo sublime y la técnica del claroscuro en la ilustración del libro clásico: John Flaxman, Henry Fuseli y John Martin.

El arte del grabado adolece de un vacío crónico en materia de reflexión y estudios teóricos. Este libro, adaptación de la Tesis Doctoral (1995), formula como hipótesis la relación entre ideas estéticas y su proyección y aplicación en la práxis artística y en la elección técnica en el campo del grabado.
El marco elegido para desarrollar la investigación es el crucial contexto filosófico, artístico y tecnológico (esto último en relación al grabado) de la Inglaterra de cambio del siglo XVIII al XIX. El medio elegido es el del libro ilustrado dada su naturaleza plástico-literaria, lo que le hace idóneo para las elevadas expectativas estéticas que se formulan desde la teoría de lo sublime. El diseño experimental tiene como constantes dos obras literarias tradicionalmente identificadas con la sublimidad (La Divina Comedia y El Paraíso Perdido) y como variables las distintas ilustraciones para ellas de Flaxman, Fuseli y Martin.
Las conclusiones identifican aspectos fuertemente correlativos entre las diversas nociones de lo sublime (desde el neoclasicismo hasta el romanticismo, pasando por una posición ecléctica entre ambos) con soluciones estilísticas, plásticas y técnicas concretas (el grabado de línea a buril, el aguatinta y el mezzotinto) de las que la obra de cada uno de los autores estudiados son ejemplos paradigmáticos. Se identifica así un vínculo esencial y necesario entre el ideario de lo sublime y su idónea representación en virtud de las técnicas de grabado que se precisan para la ilustración del libro.

Texto de Javier Barón Thaidigsmann para catálogo: Juan M. Moro. Grabados, Museo de Bellas Artes de Asturias (1997): pp. 5-10. Extracto: “Pocos artistas tan comprometidos con una investigación rigurosa y ceñida como la que en los últimos años lleva a cabo en el campo del grabado Juan Martínez Moro… [lo sublime] resulta elocuente acerca de los orígenes mismos de la tradición artística en la que Moro se sitúa y a la que ha interrogado en su obra gráfica durante los últimos años, consciente de que se trata seguramente del campo en el que lo estético se revela de un modo más fecundo en la modernidad.”